Para ello y según sus enfáticas palabras había que “…principiar por el principio…” porque nuestro país “necesitaba todo al mismo tiempo”, entre otras cosas, conocimiento de nuestro territorio, su extensión, su población, su suelo, flora, fauna, clima, etc.; se necesitaban científicos y técnicos y escuelas de formación especializadas en esos ramos; ampliar nuestro mercado interno, por ello la inmigración; comunicaciones y asegurar la provisión de recursos energéticos para mover las máquinas cuyo uso se generalizaba.